Letizia Ortiz pasó por muchas cosas cuando se convirtió en la esposa del rey Felipe IV, ya que tuvo que adaptarse a las estrictas reglas de la realeza; dejar su carrera profesional de periodismo, su libertad y su estabilidad emocional.
Durante su proceso de adaptación con la familia tuvo que permanecer a lado del rey como acompañante sin poder decir nada, así que perdió la voz en dos años de matrimonio, pero con el tiempo logró crear una familia unida y empoderarse como mujer preparada.
"La transformación no ha sido nada fácil y creo que queda mucho de periodista en ella, por ejemplo, su forma de trabajar".
"Cuando llegó a Zarzuela rompió el protocolo de la reina Sofía, que era más de saludar, conocer a la gente… Más de relaciones públicas. Ella mantiene reuniones de trabajo en las que lo pregunta todo. En ese sentido es muy pesada. La profesión de periodista la ha trasladado a su trabajo como miembro de la familia real", contó Mabel Galaz en su libro "Letizia real".
Detalles de la cocina de lujo de reina Letizia
Aunque los monarcas tienen su residencia oficial en Palacio Real de Madrid, decidieron vivir en una casa ubicada a un kilometro del Palacio de Zarzuela, conocida como "El pabellón del Príncipe", la cual tiene un costo de más de 4 millones de euros.
El palacio tiene jardines, salones amplios y luminosos con artículos decorativos del Patrimonio Nacional, además tiene una biblioteca, comedor y una sala de estar-comedor, una habitación de aseo y una cocina con "Office".
La cocina Office tiene una mesa redonda donde la familia real disfruta sus desayunos, asimismo la residencia cuenta con una cocina exclusiva para recepciones y banquetes oficiales con una mesa larga y sillas que son un regalo de los abuelos paternos del rey Felipe.