Nuevamente se encienden las alarmas por la salud de la reina Isabel. Su Majestad se encuentra en Balmoral, Escocia, donde tradicionalmente pasa los veranos, pero las inusuales visitas matutinas diarias del príncipe Carlos han llamado la atención y preocupado a los expertos.
El hecho de que el príncipe de Gales vea a su madre periódicamente y sin una planificación previa reafirma los informes de que la abuela de los príncipes Harry y William tiene problemas de movilidad. En sus últimas apariciones públicas, se le pudo ver siendo asistida por el príncipe Andrew y caminar con la ayuda de un bastón, producto de las secuelas con las que quedó tras recuperarse del Covid-19.
"Todos piensan que normalmente se ven todo el tiempo, pero no es así", expuso Ingrid Seward, de Majesty Magazine. Otra señal que genera preocupación es ha estado ausente de sus servicios religiosos dominicales.
Incertidumbre por la ceremonia del beso a cargo de la reina Isabel
Además, hay incertidumbre sobre la participación de la reina Isabel en el nombramiento del nuevo Primer Ministro el próximo mes y suena fuerte el rumor de que la cabeza de la monarquía británica no viaje a Londres.
Es más, es muy probable que Boris Johnson y su sucesor viajen a Escocia a ver a la reina Isabel en su finca. Esta sería la primera ocasión en sus 70 años de reinado en la que Su Majestad recibirá a un primer ministro saliente o recién nombrado fuera del Palacio de Buckingham.
"Se le ha aconsejado a la reina que no viaje", dijo una fuente a The Sun. "Pero obviamente nadie le dice a la reina qué hacer y, en última instancia, es su decisión, y como vimos cuando hizo una tercera aparición en el balcón del Palacio de Buckingham en el Jubileo, le gustan las sorpresas", agregó.
La última aparición pública de la reina Isabel fue cuando bajó de un avión en el aeropuerto de Aberdeen el 21 de julio. En medio de este incierto escenario, el Palacio de Buckingham se ha mantenido en silencio, por lo que aún no hay claridad donde recibirá a su actual y próximo primer ministro para la ceremonia del beso de manos el 6 de septiembre.