El título de princesa de Gales está tan asociado a Diana Spencer, la madre de los príncipes William y Harry, que tiene un cariz casi mitológico. Sin embargo, ahora hay, a menos de que renunciase al título, otra princesa de Gales.
La muerte de la reina Isabel significó el ascenso de Carlos al trono británico, por lo que el príncipe William se convertiría en el vigésimo segundo príncipe de Gales. Por tanto, su esposa, Kate Middleton, de 40 años, tendría el título que incrustó en el imaginario colectivo la madre de su esposo.
El título de princes de Gales no se ha usado formalmente desde que Diana murió trágicamente el 31 de agosto de 1997. Las cargas simbólicas del título provocaron que cuando el ahora rey Carlos III se casó con Camilla Parker Bowles en 2005 se tomó la decisión de que ella no usaría el título de princesa de Gales, aunque tenía derecho a hacerlo.
En cambio, la llamaron duquesa de Cornualles, título por el que se le conocía hasta ahora que ha asumido el de reina consorte y que también ha recaído en Kate Middleton.
Se pensó que el público, muchos de los cuales culparon a Camilla por la ruptura del matrimonio de Charles, no tolerarían que ella tomara el título que alguna vez fue de Diana. Ahora el papel de Kate parece que será más prominente, incluso podría ensombrecer el de Camilla.