Con una celebración íntima en su casa, en la que estuvo al lado de sus seres queridos entre ellos su hija Alejandra Guzmán, Enrique Guzmán festejo sus 80 años de vida, mismos en los que agradeció tener salud.
"Estoy muy bien y aunque hay momentos que no me gusta el numerito, he de decir que tengo mucho que agradecer", comentó Enrique Guzmán, cuyo momento se ve ensombrecido por el distanciamiento que tiene con su nieta Frida Sofía, quien desde hace algunos años lo tiene demandado por supuesto abuso sexual.
Esta denuncia que se dio en 2019 por parte de la hija de Alejandra Guzmán, le ha costado muchas lágrimas al intérprete de "Payasito", pues ha asegurado en entrevistas pasadas que nada de lo que lo acusan es verdad y espera que su nieta reflexione y diga la verdad.
Por lo que con motivo de su cumpleaños comentó al canal "delarosatv" que le hubiera gustado que su nieta le enviará o le hiciera una llamada para felicitarlo, "me hubiera gustado mucho, hay cosas que no puede controlar una sola persona y aquí hay dos".
Señaló que la situación legal ya se terminó con la joven, quién se encuentra radicando en Estados Unidos, lejos de su madre Alejandra Guzmán, a quién también en su momento demando.
Aunque por un momento la tristeza se vio reflejada en su rostro, por lo que no quiso enviarle ningún mensaje y mucho menos recordar alguna muestra cariño que en el pasado ocurrió en esas fechas, pero, el rockero volvió a sonreír al preguntársele que deseaba para este cumpleaños y con su tono vacilador, pidió: "Paz y amor".