Dede la sabiduría oriental, una de las más extendidas prácticas son los Mandalas, figuras circulares que se dibujan o pintan, con diversos diseños cuyas representaciones, figurativas o no, pueden tener un sentido espiritual o simplemente recreativo.
Son utilizados con fines principalmente terapéuticos, donde se confeccionan formas circulares llenas de dibujos, trazos y colores que permiten una desconexión de la vida cotidiana, así como también descubrir a través de ellos diversas maneras de poder profundizar en el cómo nos sentimos.
Existen diversas culturas que integran figuras mandálicas dentro de su simbología sagrada, sin embargo, desde oriente se recoge la idea de que alojan diversas visiones del mundo, a través de los que se puede analizar la psiquis de las personas según los colores, por ello aquí te contamos qué representan los diversos colores dentro de un mandala.
¿Qué representa el color rojo en los mandalas?
Este color primario es muy excitante, y es capaz de acelerar el ritmo cardiaco y la respiración. Simboliza en gran medida el amor y la pasión, la sexualidad y la energía. De igual manera, se representa con rojo el fuego, lo urgente y peligroso. Es capaz de provocar hambre.
Dentro de un mandala puede tener diversos significados, ya que es polisémico, para lo cual hay que apoyarse en el resto de colores que le rodean. Por ejemplo, con el negro puede revelar tendencias narcisistas y si predomina el negro por el resto, habla de tendencias suicidas, así como en conjunto con el verde habla de necesidad de sanar, pero con un verde habla de una intensidad por salir adelante.
¿Qué representa el color azul en los mandalas?
Al contrario del rojo, este color es capaz de dar calma y paz. Está asociado al cielo, el agua, el océano, la paz y serenidad. Es el color de la responsabilidad, la confianza y la compasión. Habla de una profundidad y en ese sentido se asocia con el vacío, el infinito y el universo.
Dentro de los mandalas, puede significar que hay mucha fuerza y conexión con el Universo, así como que predomina la mente más intuitiva y creativa por sobre lo racional. Puede significar que buscas momentos de paz, tranquilidad, aunque en exceso habla de la figura materna, que en conjunto a tonos muy oscuros, revela problemas con el arquetipo de la madre.
¿Qué representa el color amarillo en los mandalas?
Este color es muy expansivo, representa la juventud, fuerza y a las diversas divinidades masculinas y solares. Por esa relación, es que también representa a la conexión con lo divino y lo superior. Si bien representa a personas idealistas y risueñas, también se asocia a la violencia, la envidia y traición, puede generar ansiedad en niños y adultos.
Dentro de un mandala, representa la individualidad de las personas, que están conectados con su imaginación e intuición. Evoca lo masculino y el arquetipo paterno, por lo cual un exceso de él puede significar problemas en ese ámbito. Expresa personalidades activas, enérgicas y muy dispuestas, con mucha autonomía y autosuficientes.
¿Qué representa el color violeta en los mandalas?
Se relaciona frecuentemente con lo místico, la magia, la intimidad y la riqueza, asociando también los lujos, categorías sociales más elevadas y autoridad por sobre otros. Habla de intuición, inteligencia y creatividad. Muchas veces se viste cuando se viven procesos de entrega o experimentación de lo espiritual.
Dentro de los mandalas, representa una gran inteligencia, sabiduría para saber cómo comportarse en cada espacio, que tiene claridad de las ideas y es una persona muy reflexiva. Por otro lado, en aspectos menos positivos, habla de tiranía y autoritarismo, así como ciertos desequilibrios psicológicos, e incluso rasgos mesiánicos.
¿Qué representa el color verde en los mandalas?
El verde se asocia a la naturaleza, hojas y hierbas vivas, así como con los procesos de maduración, sanación, regeneración y a la amistad. Indica la renovación de ciclos tras pasar por momentos difíciles, por tanto también es color de la esperanza. Aunque también tiene asociación con elementos negativos, como la envidia o el veneno de serpientes.
Dentro de un mandala por lo general representará armonía, naturaleza y una renovación que se vive, aunque puede simbolizar que se vive con mucha inocencia y despojo por lo material. Si hay procesos de cambio, habla de una gran capacidad de adaptación, como también de mucha resiliencia. Suele asociarse con elementos positivos más que negativos.
¿Qué representa el color negro en los mandalas?
Este color carece de tono e intensidad, y muchas veces se asocia con la formalidad, la autoridad y el poder, así también con el mal, lo terrible y la oscuridad. Es un color que simboliza el fin, pero también el comienzo, un renacer. Es también un símbolo de no ver o no querer hacerlo, principalmente sobre nosotros mismos.
Dentro de los mandalas, puede tener un significado algo dicotómico, debido a que en su aspecto positivo puede representar un proceso de transformación espiritual y personal, así como de madurez psicológica. Sin embargo, en su aspecto menos positivo, puede revelar que la persona está muy ensimismada, sin poder ver más lejos, sumido en tristezas, penas o depresión.
¿Qué representa el color naranjo en los mandalas?
Este color es un punto medio entre lo sexual del rojo y lo espiritual del amarillo, por lo cual representa muchas veces temas emocionales. También se asocia a la lujuria y la infidelidad. Es un símbolo de poder, donde se habla de la fuerza de voluntad que se tiene y también habla de procesos que avanzan o están en un tránsito.
La presencia en los mandalas, puede revelar que se busca alcanzar equilibrios en la vida, con una continua lucha entre lo instintivo e impulsivo en contra de lo racional y espiritual de tu ser. Se busca hacer valer la persona también dentro de su círculo social, aunque en el aspecto negativo puede decir que le falta autodominio y es egocéntrico.
¿Qué representa el color blanco en los mandalas?
Este tono opuesto al negro, representa la ausencia de todos los colores, pero también la suma de todos. En general, representa el nacimiento de una consciencia, lo espiritual y lo trascendental. Son también una representación de la inocencia y pureza, pero en exceso se puede asociar con el luto y la muerte. Muchas veces es utilizado en ritos de iniciación.
Cuando está dentro de los mandalas, ya sea de manera consciente o no, este representa que estás viviendo procesos de transformación o transición en tu vida, por lo cual es probable que te estés despojando de lo que no necesitas, aunque en exceso este color hablará que aún falta lucidez para reconocer cómo seguir el camino.