
Ricardo Montaner es uno de los cantantes más queridos en el mundo, gracias a su sencillez y ganas de ayudar al prójimo; sin embargo, el cantante aún recuerda que en los inicios de su carrera no todo fue color de rosa y menos en México.
En esos ayeres cuando el cantautor venezolano buscaba hacerse de un nombre en la industria musical en México, los cantantes pasaban por el estricto filtro de Raúl Velasco, conductor del programa "Siempre en Domingo", quien podía hacer o deshacer la carrera de cualquiera con sus criticas, que no solo eran a su talento sino también a su apariencia, como fue el caso de Alaska.
Durante una entrevista con Yordi Rosado, Montaner recordó la ocasión en la que fue rechazado por el conductor debido a su forma de vestir. "Recuerdo que toda mi vida usé zapatos de goma, toda mi vida usé tenis. Yo recuerdo muy bien que mi querido y amado Raúl Velasco un día me mandó a poner zapatos".

El cantante de 64 años de edad recordó que llegó con zapatos de goma a su primera actuación en "Siempre en Domingo", pues su gente había pactado con la producción que se presentaría en cuatro ocasiones consecutivas en la emisión. "Siempre en domingo" en ese entonces era considerada la plataforma más importante para los artistas latinos.
"Velasco me había visto en Miss Venezuela y me invitó a venir a México a cantar. Cuando llegué con mis jeans y mis zapatos de goma, él pensaba que todavía no me había cambiado para cantar; tras presentarme, me vio con la misma ropa. Sin embargo, en ese momento no dijo nada, pero al término del número me informaron que la producción había cancelado mis otras presentaciones en el programa", comentó.
"Me subo al carro con las promotoras y al llegar las chicas de prensa con una caras largas me dicen, cancelaron los otros tres domingos y al preguntar por qué, solo me dijeron que ya no podría venir los otros tres domingos", compartió.

Al final me explicaron que no podía volver al programa porque estaba muy mal vestido y "para colmo te sentaste en el piso". El intérprete de "La cima del cielo" recuerda que esa experiencia le provocó un bajón bárbaro, pero al mismo tiempo le dio un empujón, ya que él y su equipo tuvieron que diseñar una nueva estrategia de promoción.
Tras varios meses de promoción en México, la ventana de "Siempre en Domingo" se volvió abrir y a partir de ese día Raúl Velasco y el cantante venezolano tuvieron una relación muy buena y cercana de amistad.







