Paul Schrader es, además de un director de cine consolidado, un guionista excepcional entre cuyo trabajo escritural se encuentran películas como "Taxi Driver" y "La última tentación de Cristo". Su más reciente trabajo de dirección es "The Card Counter", película protagonizada por Oscar Isaac, a quien a partir del 30 de marzo veremos por Disney+ en la serie "Moon Knight", que adapta un cómic de Marvel.
La historia de “El contador de cartas”, título dado en México a la producción que estrena este fin de semana en aquel país, sigue a William Tell (Isaac), traumatizado veterano de la guerra de Irak que ahora juega póquer.
En una conferencia de seguridad sobre interrogatorios y veracidad, presentada por su exjefe, el Mayor John Gordo (Willem Dafoe), conoce a Cirk (Tye Sheridan), adolescente que abandonó sus estudios y cuyo padre, ya fallecido, se relaciona con el pasado de operaciones encubiertas de Tell en Irak.
Agobiado por las cosas que tuvo que hacer como interrogador, por las cuales ha debido cumplir una condena en prisión (donde aprendió a contar cartas), Tell de repente tiene la oportunidad de "volver a relacionarse con el mundo a través de este adolescente y empezamos a ver cómo se desprende de algunas de sus cualidades negativas", dice Isaac. Volverse mentor del chico le ofrece algún tipo de redención. Sin embargo, mientras viajan de un casino a otro, se descubren los verdaderos motivos de Cirk, cuyo padre, quien se suicidó, fue entrenado por el mismo oficial militar sádico que Tell, de quien quiere vengarse.
"El contador de cartas" resume los temas clave de Schrader sobre la soledad, el aislamiento y la redención.

El personaje
Paul le escribió a Oscar Isaac para decirle que tenía un guion para él. Cuando el actor de "Escenas de un matrimonio" lo leyó, no lo entendió del todo. Incluso, cuenta en entrevista, le pareció confuso. "Pero lo leí una segunda vez y se me fueron revelando cosas, y luego una tercera. Paul Schrader es como estos grandes escritores tipo Harold Pinter, que no se revelan a sí mismos. Te tienes que comprometer con el material, reconocer que ha escrito con espacio para pensar, para subtexto, para el inconsciente, para cosas que si las ves no hacen sentido porque no lo tienen en un modo lógico, pero la mente humana no siempre actúa de modo lógico. Y eso es lo que me gustó del personaje".
Dice Isaac que "fue increíble ver a Paul moverse en el set, decir lo que quería, estar tan confiado, seguro de lo que quería y necesitaba con la cámara. Y además es muy directo y para algunas personas muy sensibles podría ser muy desarmante, pero creo que tienes que darte cuenta que no tiene tiempo para tonterías, tiene que ser muy claro sobre lo que quiere y lo que piensa que no está funcionando, cuando algo sí funciona dice eso es fantástico, está muy bien".
Como muchos de los personajes de Schrader, William Tell se desenvuelve con el tiempo. "Tienes una idea general de quién es este tipo: es misterioso, y hay algo extraño y meticuloso en sus rutinas, hasta que poco a poco empiezas a darte cuenta de lo que es, y de las cosas que ha hecho en la vida", dice Isaac sobre su personaje. "Tell es alguien que ha elegido permanecer en un estado de limbo, aprendiendo a contar cartas en la cárcel y eligiendo un perfil bajo para desenvolverse en la vida. No tiene ninguna prisa".
Para ayudar al actor de "Ex -Machina" a comprender la intensidad de Tell, Schrader le hizo leer "The Body Keeps the Score: Brain, Mind, and Body in the Healing of Trauma", de Bessel van der Kolk, uno de los mayores expertos mundiales en estrés traumático.
“Este libro fue revelador en muchos sentidos para dar forma a este personaje”, dice Isaac. “Los hombres como William Tell que vienen de un trauma no lo han afrontado realmente porque no saben cómo hacerlo; está mal visto que un hombre como él busque siquiera ayuda”.

Oscar Isaac y Paul Schrader
La relación de Oscar Isaac con Paul Schrader se remonta a muchos años atrás. Después de que el actor guatemalteco-estadounidense terminara sus estudios en la Juilliard, hizo una audición para “El jesuita”, guión de acción y explotación de Schrader que posteriormente dirigió Alfonso Pineda Ulloa, sin la participación de ninguno de los dos.
“El trabajo de Paul Schrader en el cine americano es como mi sangre vital”, dice Isaac. “Es un titán del cine y sus guiones y películas son los que me inspiraron a ser actor”.
Paul Schrader no dejó de tenerlo en la mira. Incluso lo contempló para “First Reformed”, en la que finalmente eligió a Ethan Hawke. Para el realizador, Oscar Isaac tiene un cierto cruce “entre Roman Novarro y Marcelo Mastroianni”, dice Schrader. “Oscar es hispano y la intensidad viene acompañada de una especie de vacío en el que se pueden leer cosas. Cuando quiere estar en blanco, puede estarlo. Oscar sabe hacerlo de forma intuitiva”.