“La Cabaña” estrena este viernes 12 de enero un nuevo capítulo por las pantallas de Mega. El programa junta a parejas de amigos famosos para que convivan durante un fin de semana y TiempoX tuvo acceso exclusivo al adelanto.
La próxima entrega cuenta con la participación de Kenita Larraín, y su amiga Mariela Sotomayor, mientras que la segunda pareja está compuesta por la actriz Javiera Acevedo con el periodista y comediante Pablo Zúñiga.
En la dinámica de la fogata, se hacen preguntas sobre situaciones de sus vidas. Ahí, la rubia tomó la palabra para preguntar a su amigo: ¿Cómo vuelves a creer en una vida o encantarte de nuevo con respecto al amor?
Ahí, el comunicador puso en contexto la fecha del término de su matrimonio con Tatiana. “La verdad es que yo me separé antes de la pandemia y luego vino la pandemia que me afectó laboralmente”. Comentó que estuvo dos años sin trabajo, donde debía mantener a sus 5 hijos, junto a todos los gastos que eso conlleva: “5 colegios, 5 doctores, 5 dentistas, 5 todo”, agregó.
Frente a está situación confidenció que tuvo que trabajar en Uber, pero en el intento fracasó, debido a que las personas se subían al auto y creían que era una broma. “Me decían ¡Ah cámara oculta! y se bajaban”, contó.
Respecto su relación confesó haber entendido que no funcionó y que ya ha superado el tema. “Estoy recién, creo, volviendo a levantarme”, apuntó. Al finalizar su dialogo frente a la fogata, confesó que para él su historia es salvada por sus hijos y por haber coincidido con una polola en el peor momento de su vida. “Nunca he estado peor que en estos últimos años, en resumen es el amor en sus distintas formas”, afirma el comediante Pablo Zúñiga.
De la amistad al amor de pareja
Natalia Schreiber, la actual pareja de Pablo Zúñiga, hace un año aproximadamente, contó cómo fue el inicio de su historia de amor.
Ella volvió de Estados Unidos, tras el término de su matrimonio en 2022 y tenía ganas de hacer cosas nuevas en relación a lo laboral. Así se encontró con Zúñiga, trabajando en una radio, donde iba a hacer reemplazo. Desde ahí se hicieron muy buenos amigos, compartiendo proyectos profesionales que hoy hacen en conjunto.
“Esto partió como una amistad muy entretenida, muy de reírnos, de mucha conversación y ahí uno se va dando cuenta de que esto va para algo más”, contó Natalia Schreiber en una entrevista con LUN.
