En vista de su reciente salida de Mundos Opuestos, TiempoX conversó con Mario Ortega, más conocido cariñosamente como Súper Mario, respecto a su última experiencia dentro del encierro de Canal 13 que lo regresó a la palestra mediática.
Uno de los puntos tocados fue su llamativo estilo compuesto por un pelo tan largo que, cuando este se suelta, le llega a la altura de las rodillas.
Por lo mismo, Ortega no solo contó la verdad del por qué mantiene este estilo desde hace casi 10 años, sino que también los secretos para mantenerlo sano y brillante, incluso dentro de un reality extremo como el último donde estuvo.
Súper Mario y su pelo: Desde 2016 que no lo corta
Oye, Mario, hablemos de tu pelo. ¿Te lo has medido? ¿Hasta dónde te llega?
-Mi pelo tiene una longitud aproximada de 1 metro y medio. En trenza me llega un poquito más abajo del popín y suelto un poquito más abajo de las rodillas.
¿Y por qué ese estilo de pelo y no otro?
-Yo no me encuentro una persona agraciada, tampoco fotogénica. Entonces, para nosotros, los poco agraciados y pocos fotogénicos, tenemos que estar en una constante búsqueda de nuestro lado, del look que más no asienta, de tener de arreglarnos de la mejor manera.
¿Por eso el pelo largo?
-Yo he tenido muchos looks: he tenido la barba candado; bigote a lo Lemmy de Motorhead; barba completa de dos meses; aquí mismo en Mundos Opuestos estuve con una barba de dos meses… ¡Horrenda! También me he rapado al cero con Gillette. Todos los estilos, hasta que llegué pelito melena.
¿Y ahí qué pasó?
-Aquí voy a hacer referencia, voy a contar algo también íntimo (risas) Cuando entré a mi primer reality, conocí a un caballero llamado Sergio Nakasone. Él tenía el pelo largo y liso como hasta por los hombros. Lo vi y me dije: “Oh, mira, qué buena onda. Qué simpático el look”. Luego conocí a otro director, Mirko Morán, quien también tenía el pelo largo y más que Don Sergio. Y, terminando 1810, me dejé el pelito y dije “no me lo cortó más… veamos hasta dónde llega”. Y ahí me lo dejé crecer, me lo dejé crecer, me lo dejé crecer.
¿Y no te lo volviste a cortar?
-La última vez que me corté el pelo corto fue cuando estaba en Australia el 2016, marzo. O sea, hace 9 años. Y creo que es lo que más me acomoda, porque solo dejo que fluya y que crezca.
¿Hay algo detrás de la decisión?
-Me preguntan por si es por alguna manda (risas), pero no. Es solo mi deseo dejar que todo fluya y no intervenir y que sea feliz para no estar preocupado, también, de los looks.
Respecto a los cuidados, ¿cada cuánto te lavas el pelo?
-Me lavo el pelo una vez a la semana y ocupo productos de shampoo seco cada tres días y me lo mantiene… ¡uy, son superbuenos!
¿Y cómo te desenredas el pelo?
-Con peines de marfil y cuando da tirones no grita y dice ¡WIII! (Risas). Me peino todos los días, todos los días me desarmo la trenza y me peino. Antes me demoraba caleta, ahora poco porque me compré un cepillo espectacular. De hecho, cuando estaba en el Futuro (del reality) la gente me lo pedía. Me demoro 10 minutos, incluso menos, entre 5 y 8 minutos. Todos los días.
¿Y cómo lo hiciste con tu pelo en el encierro, estando casi 7 semanas en el pasado?
-Fue terrible lo de mi pelo en el pasado, no tenía cómo cepillármelo ni lavarlo, creo que lo hice dos veces en todo ese tiempo. Fue terrible para mí porque solo podía dejarme la trenza como única forma de mantenerlo, entre comillas, ordenado. De hecho, cuando pasamos al futuro, les costó mucho desenredármelo, más de lo normal.
