
El pueblo inglés sigue muy atento con la herencia de la Reina Isabel II, quién se queda con sus pertenencias o qué hará el Rey Carlos III con las posesiones más amadas de la Monarca. Ya vimos que los queridos corgis (que por cierto la acompañaron a su funeral) se quedaron a cargo del príncipe Andrés y su exesposa Sarah Ferguson debido a que ellos se los regalaron. Ahora la preocupación está en sus caballos que tanto disfrutó y amó en su vida... el pueblo tiene una candidata para que los herede.
A través de redes sociales los seguidores están suplicándole al Rey Carlos III que le deje los caballos de la Reina Isabel II a Zara Tindall, la hija de la princesa Ana. La razón es porque la consideran una mujer que podría asumir tal responsabilidad, amarlos y respetarlos tal y como su abuela lo hacía. Le piden constantemente que no los lleve a subasta.

El nuevo Rey quiere mandar a subasta 13 caballos purasangre a finales de octubre que le pertenecieron a su madre, la razón es porque a él nunca le encantaron tanto los animales y prefiere quitarse el peso de su cuidado además de reducir al máximo la multimillonaria operación de carreras de caballos que llevaba la difunta Reina Isabel II.
Muchos creyeron que la Reina Consorte Camilla iba a ser la nueva dueña de los caballos; sin embargo, no sucedió así y al parecer lo que quiere el Rey Carlos es deshacerse de ellos.

Zara Tindall por otro lado, así como su mamá, son grandes fanáticas de los caballos. La nieta de la Reina Isabel II es ex campeona mundial de concurso completo y medallista de plata en los Juegos Olímpicos de 2012.
Todo el pueblo está de su lado enviando millones (sin exagerar) de peticiones sugiriendo que la prima mayor del príncipe William sea a heredera de una de las aficiones más grandes de la siempre recordada Monarca pues asegura el pueblo, ella se enojaría y entristecería mucho si se venden todos.