"Licorice Pizza" es la nueva película de Paul Thomas Anderson, la cual estrena este 24 de febrero. Situada en los años setenta en Los Ángeles, sigue la relación entre Alana (Alana Haim) y Gary (Cooper Hoffman). "Es una película que se pregunta qué sucede cuando dos personas que no pueden estar juntas no pueden evitar estar uno con el otro", explica Alana Haim en una entrevista compartida por Metro Goldwyn-Meyer.
Con una suculenta ambientación en locaciones, escenografías y vestuario, la película sigue esta peculiar relación mientras de fondo aborda complejos temas sociales, políticos y económicos de incidencia actual sin que se distraiga la atención en la bellísima relación que construye Paul Thomas Anderson, con su peculiar estilo para abordar historias románticas.
Gary es un adolescente famoso por su participación en un programa televisivo familiar, mientras Alana es una chica de 28 sin un rumbo fijo. "Alana es volátil e inestable en su vida", explica la actriz que participara en "The Fashion Fund". "Y Gary tiene los pies en la tierra y tiene mucha automotivación, es un adolescente".
Para Alana, "Licorice Pizza" "es una cinta que tiene este bello y poderoso valor que va entre estos dos personajes de formas humorísticas. Es una película que habla sobre el destino y los más grandes temores de la juventud".
Además, Alana, quien manejó un camión gigantesco de reversa por las calles de Los Angeles y se subió a una moto con Sean Penn en una escena de riesgo, dijo que confió en todo de Paul. "Y él confió en mí. Quería hacer todo, estaba listo para cualquier cosa que me pidiera en cualquier momento y estaba tan emocionada de ser parte de este proyecto que si Paul me hubiera dicho que saltase en paracaídas al día siguiente, habría dicho, ¿dónde está mi paracaídas? Realmente todo se redujo a la confianza".
