El rey Carlos III y su esposa, la reina consorte Camilla, llegaron este miércoles a Alemania en su primer viaje que realizan al extranjero desde que asumieron el trono, en septiembre pasado.
Esta noche en la cena que ofrecieron el presidente alemán Frank-Walter Steinmeier y su esposa Elke Buedenbender en el palacio presidencial Bellevue en Berlín, para darle la bienvenida a los nuevos monarcas, la reina consorte quiso rendir un tributo especial a la reina Isabel II, quien murió hace seis meses.
Para ello, la reina Camilla usó un espectacular vestido en color negro con aplicaciones en color plateado, una distinguida tiara de diamantes además de un broche que perteneció a la difunta reina Isabel II y que le fue entregado en su confirmación en 1942 por la reina María.
Como parte de su visita real, los reyes de Inglaterra publicaron un comunicado a través de su cuenta de Instagram oficial emitieron un comunicado en el que resaltan lo entusiasmados que están por estrechar nuevamente lazos con el país vecino.
“Antes de nuestra primera visita de Estado a Alemania, estamos ansiosos por conocer a todos aquellos que hacen que este país sea tan especial…“Es una gran alegría poder continuar la profundización de la amistad de larga data entre nuestras dos naciones”. reza el documento.
A su llegada a Alemania, los reyes Carlos y Camilla fueron recibidos con un saludo de 21 cañonazos y un vuelo de aviones militares. Luego caminaron por una alfombra roja donde estrecharon la mano de los funcionarios antes de subirse a su automóvil para dirigirse a la Puerta de Brandenburgo.