El impacto de "Yo soy Betty, la fea" crece cada día más después de más 20 años de su estreno. La famosa telenovela repunta cada cierto tiempo en el top 10, como uno de los contenidos más vistos de Netflix y es que su gran historia sigue emocionando a espectadores de todas las edades e incluso generaciones nuevas.
"Yo soy Betty, la fea" es una telenovela colombiana que se estrenó en 1999 y que se emitió en 180 países, fue doblada a 25 idiomas, contó con al menos 28 adaptaciones alrededor del mundo. Cuenta la historia de Beatriz Aurora Pinzón Solano, una chica muy inteligente pero poco atractiva físicamente (según lo estándares de belleza impuestos por la sociedad) que soporta insultos y discriminaciones por su apariencia física.
Pero, lo que casi nadie notó es que Betty tenía todo lo necesario para ser una gurú de moda, y aquí te dejamos las pruebas.
1. Tendencia oversized
Betty era experta en portar prendas holgadas, una tendencia muy fuerte en los últimos años y que continúa en boga. Blusas, chalecos, sudaderas, camisas o chamarras, con la prenda que sea, esta tendencia la usan modelos, influencers y famosos.
2. Lentes de pasta
Desde hace algunos años los lentes de pasta están en tendencia, podemos encontrarlos de mil colores, formas y diseños. Betty los usó en un tono rojizo, que seguramente hoy cualquiera de nosotros usaría sin pensar.
3. Chalecos
Los chalecos regresaron fuertemente a finales del 2020. Tejidos, de algodón, a cuadros, lisos o con estampados, lo importante era divertirse y crear looks divertidos. Betty lo usó hace más de 20 años y hoy siguen en tendencia.
4. Cejas pobladas y despeinadas
El personaje de Betty fue de los primeros que no delineaba ni se depilaba la ceja. Las cejas despeinadas, desde hace algunos años, es una tendencia muy fuerte donde lo importante es dejarlas lo más natural posibles y con vello abundante.
5. Suéteres
Como cada invierno, los suéteres son la pieza clave de cualquier look, sobre todo los oversized, tal como lo usaba Betty en la telenovela.
6. Vestidos vintage
En la actualidad la cultura de usar ropa de segunda mano está más fuerte que nunca, no sólo para tener piezas únicas si no también para cuidar el medio ambiente. Desde hace 20 años, Betty usaba vestidos de su mamá, abuelita u otras personas luciendo siempre bonita.