El Yoga como disciplina es un estilo de vida bastante completo, el cual se desarrolla a través de ejercicios físicos corporales que permiten dar salud al cuerpo y a la mente. Esta práctica ha determinado que las manos también son un importante canal de energía, a través de la cual podemos también favorecernos.
Esto lo realiza a través de los Mudras, gestos que se realizan con las manos y que entregan muchos beneficios para nosotros, los cuales son otros recursos a los que recurren quienes practican yoga y meditación para aumentar la intensión de la práctica.
Aunque su origen es hindú, hoy son conocidos en todo el planeta y saber cuáles son te dará una herramienta más que puedes aplicar para sacar lo mejor del día a día.
¿Qué son los Mudras?
Son posturas manuales que se generan con los dedos y las palmas, que tienen por objetivo evocar ciertas energías en particular para que potencien determinados estados, que ayudan con el trabajo personal que se está llevando.
La palabra proviene del sánscrito y se traduce como "sello" o "anillo para sellar", haciendo referencia a la forma que el gesto tiene y que permite concentrar o "sellar" la energía deseada.
Así, cada elemento tiene un simbolismo, principalmente en referencia a los cinco elementos del Universo para los hindúes, desde donde se activan los chakras y otras energías del cuerpo.
Son utilizados en ciertas prácticas de yoga ya que facilitan la conexión con algunos objetivos e intenciones, y algunas posturas de meditación también recurren a los Mudras, que junto con determinados mantras, potencian estados meditativos y de introspección.
3 mudras y sus beneficios
Ahora bien, estos gestos actualmente se utilizan fuera de las prácticas yóguicas y meditativas, por lo cual también puedes conocer las posturas que potencian ciertas energías cuando las necesites. Aquí te presentamos tres conocidos mudras que podrás realizar cuando quieras.
Es de los más conocidos, el cual consiste en juntar las manos por las palmas en vertical. Suele acompañarse de la palabra Namasté, como saludo, a través de la cual se evoca el respeto y la sinceridad de nuestro ser en la actividad que se realizará. Además, estimula concentración y el respeto personal.
Se realiza juntando la yema del dedo pulgar e índice, mientras los demás dedos permanecen estirados. Este se utiliza para traer calma y es el indicado para los momentos de estrés, conectando a las personas con su sabiduría interior.
Sencillo y práctico, el cual lo puedes aplicar a lo largo del día. Para evocarlo, debes entrelazar los dedos de la mano, con la palma mirando hacia arriba. Este atrae la paz y tranquilidad, otorgando la serenidad a los entornos, siendo muy favorecedora como antesala a estados meditativos.
