Kate Middleton tiene, desde hace una década, a una mujer que la acompaña a donde quiera que vaya. Se trata de Emma Probert, una mujer de semblante serio, con atuendo regularmente oscuro, a veces con falda y tacones bajos, pero siempre armada y pendiente de lo que pasa alrededor de la princesa de Gales.
La esposa del príncipe William cuenta desde 2010 con la protección de la sargento Emma Probert, oficial de Scotland Yard. Su apariencia es una ventaja añadida en su trabajo, pues pocos sospechan que debajo de su discreto outfit lleva consigo una una pistola Glock de 9 mm, una pistola eléctrica y un chaleco antibalas.
Con una agenda repleta dadas sus nuevas responsabilidades que le trajo consigo su nuevo título y sus deberes de mamá, Kate Middleton requiere un equipo de seguridad con los mejores agentes.
De pelo castaño, rostro alargado y mirada de pocos amigos, Probert, quien se ha convertido en la sombra de la royal más popular de la corona británica, también es una experta en artes marciales, por si en alguna ocasión se llega a quedar sin municiones.
Luego de casi una década de trabajar con la princesa de Gales, Probert también se ha convertido en una de las amigas cercanas de la royal y es habitual verlas conversando cuando salen al parque, practican deporte o dan paseos.
Probert forma parte del Escuadrón de Protección de Scotland Yard y recientemente fue nombrada integrante de la Royal Victorian Order durante una ceremonia en el Palacio de Buckingham. El reconocimiento es una prestigiosa orden de caballería en la que entran personas que se han distinguido en el servicio prestado al monarca o a su familia.
Emma Probert, quien perdió a su esposo en un trágico accidente de esquí, actualmente mantiene una relación con un exescolta de la reina Isabel II, el inspector Colin Childs. La sargento también fue escolta de las princesas Eugenia y Beatriz de York.