
Britney Spears sigue en medio de la polémica luego de que en los últimos días se diera a conocer que estaría enfrentando una nueva crisis de salud mental que tiene preocupados a su círculo más cercano.
Bajo ese contexto, la cantante de 41 años fue vista el jueves pasado manejando su auto sola y sin rumbo fijo por alrededor de 30 minutos en la ciudad de Los Ángeles. Se detuvo en un estacionamiento y después de terminar una llamada telefónica regresó a su residencia.
Una fuente cercana a la también conocida como "princesa del pop" comentó a Daily Mail que su crisis depresiva fue provocada por la mala relación que tiene con sus hijos, Sean Preston y Jayden James, fruto de su breve matrimonio con Kevin Federline y a quien no ve desde hace un tiempo.

"Todos están preocupados por ella porque está muy deprimida… Britney no está bien, eso es cierto", mencionó un amigo de la estrella.
"El problema es que está muy triste porque sus hijos no la verán, se siente muy mal por eso, es un gran agujero en su corazón. Ella es madre de dos niños y nunca los ve, creo que cualquier madre estaría desconsolada por eso", continuó.
Britney Spears solo consume medicamentos autorizados
El informante negó de manera contundente que Britney Spears estuviera consumiendo alguna sustancia diferente a la que le ha sido autorizada, entre ellos el Prozac, un medicamento recetado para combatir la depresión.
"No la he visto consumir drogas, no la he visto beber, nada, pero todos saben que es bipolar y diferente y que está tomando muchos medicamentos para eso, por lo que su estado de ánimo puede tener altibajos, pero ella no es drogadicto y no corre peligro de morir. Pero está muy deprimida, lo cual es preocupante", detalló.

La fuente aseguró que hasta ahora ningún familiar o algunos de los empleados de la intérprete de “Toxic” ha hecho algo para intervenirla sin que ella se entere como mucho se ha especulado, ya que ella es lo suficientemente capaz como para hacerse cargo de su vida y de sus responsabilidades.
"Tiene un equipo a su alrededor que hace todo por ella, como pagar las cuentas, lavar la ropa, cargar gasolina en su auto. Son como sirvientes…Ella toma todas las decisiones y si no le gusta alguien, lo despide. Nadie puede obligarla a hacer nada", sentenció.






