Las piedras o gemas suelen ser reconocidas por sus diferentes formas, colores, texturas y sobre todo por ser potentes portadoras de energías. Es que hay algunas reconocidas por sus propiedades curativas para distintas dolencias y también usadas con fines más emocionales, siendo algunas especiales para ayudar a calmar la ansiedad, revitalizar la energía y otras para ayudar a conciliar el sueño.
En esta ocasión enfocaremos nuestra atención en las piedras que ayudan a proteger nuestra energía en ambientes densos o con personas negativas, actuando muchas veces como escudos aúricos.
¿Qué piedras sirven para protegerse energéticamente?
Esta piedra negra es reconocida por sus propiedades protectoras, ya sea de las radiaciones electromagnéticas de los celulares como de las intenciones negativas de las personas o ambientes cargados con energía densa. La turmalina negra actúa como una esponja que absorve el estrés al igual que nuestros propios pensamientos negativos, transformándolos en luz.
Esta piedra negra es reconocida por otorgar fuerza a quien la sostiene y actuar de escudo contra la energía de estrés o llena de negatividad que pueda estar al rededor de las personas. Las vibraciones energéticas del Ónix negro ayudan a sanar cualquier herida por medio del vigor y perseverancia que esta piedra entrega.
El ojo de tigre es la famosa piedra del sol, la cual se destaca por otorgar energía y determinación a quien la ocupa, ayudando a alcanzar los objetivos con mucha autoconfianza, dejando de lado cualquier negatividad que esté presente interna o externamente.
Esta piedra morada es reconocida por sus propiedades energéticas que ayudan en la meditación, curación, la paz, el amor, la intuición y la protección. La amatista es una transmutadora de energía negativa en positiva desde un lado más amoroso y tierno que otras piedras, pero con gran energía.
