Una sangrienta celebración fue la que protagonizó Machine Gun Kelly el pasado martes en la noche. El cantante tenía motivos para festejar: acababa de presentarse ante un Madison Square Garden completamente vendido.
"Me desperté y me di cuenta... ¡Esta noche vamos a tocar en un concierto con entradas agotadas en el Garden!", había comentado en su cuenta de Twitter horas antes, compartiendo su emoción.
Un show que también contó con la participación de Landon Barker, hijo de Travis Barker, quien en esos momentos estaba internado, preocupando a su hija y a Kourtney Kardashian.
Tras el exitoso show, Machine Gun Kelly y sus cercanos fueron a celebrar a restorán Catch en la ciudad de Nueva York. Fue ahí donde el cantante se agredió con una copa de champaña. "Me importa un carajo, hermano. Me importa una mierda", dijo tras golpearse en la cabeza y empezar a sangrar profusamente.
La pareja de Megan Fox compartió el momento en su cuenta de Instagram con el siguiente mensaje: "Y aquí es cuando las cosas cambiaron...". Además, subió varias fotos de su rostro y ropa con sangre, mostrando la herida que se infligió.