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El día que el rey Carlos puso sus pies en una corona y le presagiaron mala suerte

Dentro de la monarquía británica existen muchas supersticiones, una de ellas es que no se debe tocar la corona de San Eduardo antes de tiempo

En menos de dos semanas se llevará uno de los hechos históricos más sorprendentes, la coronación del rey Carlos III, luego de que su madre, la reina Isabel II falleciera el pasado 8 de septiembre del 2022, por lo que ahora el será nombrado como el nuevo monarca, pero en las últimas semanas han surgido algunas teorías donde predicen mala suerte para el padre del príncipe Harry, como la que a continuación te compartimos.

Primero tenemos que remontarnos a cuando el rey Carlos era un niño de apenas cuatro años de edad y estuvo presente en la coronación de su madre, la reina Isabel II, en 1953.

Entonces Carlos era un niño y fue llevado a la Abadía de Westminister, en donde millones de británicos pudieron ver el evento histórico, por televisión.

Carlos III se sentó entre la reina Madre y la princesa Margarita con una mirada sombría en su rostro, molesto por la “masilla” que se usaba para aislar su cabello. Durante la ceremonia, el joven príncipe también puso sus pies sobre la corona sagrada de San Eduardo, lo que generó temores de un “mal augurio”.

Según los expertos en la realeza, esta fue una señal de mal gusto para el joven príncipe, ya que se considera un acto de mala suerte tocar o ponerse la corona antes de que uno sea coronado, por lo que, la acción de Carlos II del Reino Unido no pasó desapercibida.

Esta superstición ha estado presente en la historia de la monarquía británica durante siglos, y se cree que se originó a partir de la creencia de que la corona tiene un poder divino y solo debe ser usada por el monarca que ha sido ungido y coronado por Dios.

A pesar de este mal presagio, Carlos III se ha convertido en el heredero al trono británico y ha esperado pacientemente su turno durante décadas, aunque, no se sabe si la larga espera esté relacionada con el hecho de haber tocado la corona de San Eduardo antes de tiempo o solo son coincidencias de la vida.

Ahora, a sus 72 años, el rey Carlos III del Reino Unido está listo para asumir el papel que ha estado destinado para él desde su nacimiento y lo hará de la mano de su esposa, Camila, la cual ha trabajado en la aceptación del pueblo británico, pero no al nivel que tenía Lady Di.

Mientras se prepara para su propia coronación, Carlos III seguramente tendrá su experiencia en la coronación de su madre hace casi 70 años, y quizás tenga en cuenta la lección de no poner los pies en la corona sagrada de San Eduardo antes de tiempo.

Los niños en la coronación

Al igual que hace 70 años, el rey Carlos III ha invitado a algunos niños a estar presente en la coronación, entre ellos, su nieto, el príncipe George, de nueve años, quien presenciará el hecho desde casi el mismo lugar que el monarca cuando era niño, lo cual recuerda la larga tradición de la realeza británica.

Porque, como te contamos previamente, la presencia de un joven príncipe Carlos en la coronación de su madre en 1953 muestra la larga tradición de la monarquía británica.

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