Televisión

Eduardo Capetillo regresa a "Marimar" pero ahora con Mariana Echeverria

En el reality show, "Mi famoso y yo" se hizo la parodia de la telenovela que catapultó a Thalía.

Eduardo Capetillo regresó a la televisión con su parodia de "Marimar". - Créditos: Twitter: "Mi famoso y yo" Eduardo Capetillo regresó a la televisión con su parodia de "Marimar". - Créditos: Twitter: "Mi famoso y yo"

En 1996,  Eduardo Capetillo se convirtió en el galán de las telenovelas con su personaje "Sergio Santibáñez"  quien enamoraba a "Marimar" interpretada por Thalía en la telenovela homónima.

Ahora a 27 años del estreno de la telenovela que catapultó a los actores, Eduardo Capetillo ha decidido participar en una parodia en el reality show, "Mi famoso y yo" para apoyar al equipo de amigos de  Mariana Echeverria y de Arly. 

En la parodia, los actores recordaron una de las escenas más fuertes de la televisión mexicana, cuando Thalía recogió una cadena de oro con la boca.

Angélica Santibáñez, la villana de la telenovela, fue interpretada por Arleth Terán quién salió en una botarga de caballo, ya que Chantal Andréde en la telenovela salía montando un caballo. 

Al final, al igual que en la telenovela, el amor vence y Eduardo Capetillo le pregunta a Mariana Echeverria (quién acaba de recoger la cadena del lodo) si lo ama a lo que ella en su papel de "Marimar contesta: "Claro que te amo además te ves más guapo en la vida real". 

En su época así se filmó la fuerte escena de "Marimar"

Thalía tuvo que recoger una pulsera del lodo con la boca y sobre cómo se trabajó la escena, Chantal Andrade contó en una ocasión para TVnovelas que:

“Cuando yo le tengo que aventar la pulsera a Thalía al fango, si recuerdan la escena estoy en un caballo y estamos en la playa. En ese momento, se logró hacer una mezcla de chocolate que parecía arenoso para que Thalía a la hora de tomar la pulsera no tuviera que meter la boca al lodo”. 

Así como en una entrevista en 2020, Thalía añadió:

“La productora dijo, ‘póngamosle chocolate’ e hicieron chocolate, pero yo lo veía anaranjado. Efectivamente, cuando grabo la primera escena, saco la cadena, se veía naranja. Entonces, me fui a un rinconcito y le dije a la productora que lo hiciéramos bien. Era una escena contundente que iba a repetir como venganza en el final. Se tenía que hacer de verdad. ¡Después de grabar, me tuve que ir directo al mar!”

 

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