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Hay dudas de que el rey Carlos III opte por vivir en el Palacio de Buckingham. Si bien el icónico inmueble seguirá como "cuartel general operativo" del monarca, podría ser que decida no vivir allí.
El palacio está en mantenimiento desde hace cinco años y aún le faltan otros cinco para que se terminen los trabajos valuados en casi 370 millones de libras esterlinas.
Se dice que el Carlos y Camilla se encuentran cómodos en Clarence House y, de hecho, el rey lo considera más sostenible que el Palacio de Buckingham, según información compartida por el diario The Times, el cual desde 2017 había referido que Carlos planeaba utilizarlo como un "cuartel general de la monarquía" comercial.
Entonces, Clarence House negó el plan y dijo en un comunicado: “El Palacio de Buckingham seguirá siendo la residencia oficial del monarca”.
Según los informes, la intención del rey es transformar las residencias reales de "espacios privados a lugares públicos". Fuentes reales citadas por el diario británico dijeron: "Siente que su mantenimiento, tanto desde el punto de vista económico como ambiental, no es sostenible".
Además, otra fuente real dijo: “Ciertamente es cierto que Camilla no quiere vivir en el Palacio de Buckingham”.
También se entiende que el príncipe William está de acuerdo en que el palacio no es adecuado para la vida familiar moderna. Con el tiempo, se espera que William y su esposa Kate, que recientemente se mudaron del Palacio de Kensington a Adelaide Cottage en Windsor, hagan del Castillo de Windsor su hogar familiar.
El Palacio de Buckingham ha sido residencia oficial en Londres de los soberanos británicos desde 1837. Fue la residencia principal de la reina durante hasta marzo de 2020, cuando los cierres de coronavirus la llevaron al Castillo de Windsor y, posteriormente, se mudó del centro de Londres de forma permanente.