La princesa Märtha Louise, de Noruega, ¿renunció a su título para poder casarse?

La princesa Märtha Louise, de Noruega, había confirmado en junio su compromiso con Durek Verrett, el espiritista personal de Gwyneth Paltrow, también conocido como el chamán de las estrellas.

Verrett, de 47 años, habría pedido la mano de la princesa de 50 años de forma tradicional. "Soy muy anticuado en la forma en que hago las cosas", dijo entonces. "Si me hubieran dicho que no, no hubiera seguido adelante. Hago las cosas de una manera honorable y respetuosa".

Ahora, la princesa Märtha Louise despejó las dudas sobre el papel que desempeñará dentro de la familia real noruega, pues se decía que usaba su título de princesa para sus propios fines.

¿Dejará de ser princesa?

Aunque la princesa Märtha Louise ha dejado en claro que dejará de trabajar para la familia real, no ha renunciado a su título, el cual conserva por deseo expreso de su padre, el rey Harald.

Sin embargo, y con la finalidad de evitar malos entendidos entre sus actividades privadas y las de la casa real de su país, Märtha Louise no desempeñará ninguna función oficial. Eso significa que ha renunciado a los cargos de patrona en las organizaciones que representaba. "El rey y la reina desean agradecer a la princesa Märtha Louise los importantes esfuerzos que la princesa ha realizado a través de su trabajo oficial durante décadas", se leía en un comunicado. "Ha llevado a cabo su trabajo con esmero, calidez y gran compromiso".

Además de su título de princesa, Märtha Louise conservará el cargo de presidenta de la junta directiva de la Fundación Princesa Märtha Louise, establecido el 15 de septiembre de 1972 (un año después de su nacimiento) y cuyo objetivo es ayudar a niños con discapacidad.

Con estos anuncios, se ha establecido como un hecho la boda entre la princesa y el chamán, cuya fecha podría fijarse en cualquier momento.

Y aunque se dice que la familia real noruega ha recibido con alegría a Durek, ha querido dejar claro que la monarquía tiene “unos límites de lo que se puede decir y hacer representando a la casa real”.

Donde sí se verá al futuro matrimonio con miembros de la familia real será en eventos familiares importantes, como cumpleaños, o en algunos actos deportivos destacables en los que es tradición que los reyes, sus hijos y nietos estén presentes.

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