Mónica Ramos llegó de vuelta a Chile tras ser eliminada de “Gran Hermano” y se refirió a su relación con Jennifer Galvarini, la Pincoya. La participante más longeva de la historia del programa definió su estadía dentro de la casa como “Un sueño cumplido, un sueño maravilloso. Lo pasé súper, súper bien. Me sentí acogida, me sentí querida”, según consigna CHV.
Al ser consultada sobre cómo le gustaría ser recordada, señaló que le gustaría que la gente se acordara de ella “como una persona que tuvo el orgullo de pertenecer a ese grupo de 95% de jóvenes, de 50 años menos que yo, y que me supe adaptar a ellos y ellos también a mi”.
Las relaciones que marcaron el paso de Mónica Ramos por “Gran Hermano” Chile
Mónica Ramos, de 77 años, alcanzó a estar poco más de tres meses en “Gran Hermano” Chile, donde se destacó por ser una figura de respeto para sus compañeros quienes la cuidaron y protegieron como si fuera sus propias abuelas durante su estadía en la casa.
Al principio del reality, Mónica tuvo una compleja relación con el modelo Jorge Aldonay, quien consideraba que, por su edad y por su estado de salud, Ramos no debía permanecer en la casa, relación que con el paso del tiempo alcanzó una tregua pacífica.
Sin embargo la relación más complicada de Mónica Ramos durante su estadía en “Gran Hermano” Chile fue con Jennifer Galvarini, más conocida como la “Pincoya”, con quien tuvieron una serie de rencillas a lo largo de los meses, que concluyeron con Mónica asumiendo que, a pesar de sus diferencias, le gustaría que fuera la oriunda de Chiloé quien ganara el reality show.
“Ella tiene sus costumbres que yo casi no las entendí mucho. Una sola vez tuvimos un problema con ella pero lo arreglamos. Siempre trataba de entenderla a ella por sus costumbres que ella traía, que no eran de mi agrado. Yo le dije que yo la iba a recordar con mucho cariño, porque también es una persona súper sencilla. Diablilla, pero sencilla. Yo le dije “yo espero que tu me eches de menos”. “No”, me dijo, “yo no echo de menos a nadie”. “Ah ya”, le dije yo, “conforme, pero yo igual te voy a echar de menos””, relató, aunque confiesa que es a la que menos extrañará dentro de la casa.
Pero sin duda a quien Mónica Ramos más echará de menos es al joven participante Hans Valdés, de 18 años, con quien creó gran cercanía durante el encierro en “Gran Hermano” Chile y a quien más extrañará de sus compañeros. “Para mi él fue mi nieto adoptivo, porque lo encuentro un joven muy parecido a mi nieto, entonces yo lo tomé como mi nieto y le tengo mucho, mucho, pero mucho cariño y él lo sabe”.
